Registro fotográfico RK
Un mail que va, un mail que viene:
intercambio con Fernando Falconí alrededor de su reciente muestra “Leviatán”.
Rodolfo Kronfle: Hay varias cosas que me llaman la atención
sobre tu nuevo trabajo, trataré de segmentar las inquietudes: Hay muchísimas piezas, la mayoría de pequeño formato, y lo
primero que estuve pensando es que tal vez es más demandante hacer algo así que
pensar en una serie de 12 pinturas grandes, por ejemplo, como más o menos han
sido tus muestras anteriores. A partir de detalles como este intuyo que te has
replanteado cómo abordar tu trabajo actualmente, ¿qué me comentas?
Fernando Falconí: Sí,
creo que el gran formato se ameritaba en las propuestas anteriores, en especial
en la serie de libros escolares, ya no empleo los bocetos ni estudios previos
como lo requerían las otros proyectos. Pero en estas nuevas obras las
dimensiones que uso me permiten "controlar" mejor todos los procesos
de producción, a mas de evitar la ansiedad de pensar que me equivocaré en
grande cuando elaboro las piezas. Creo que es igual la dificultad y la
expectativa que siento cuando intento resolver este tipo de pinturas con un
guión inicial muy escueto, no es tan sencillo como me lo imaginaba. Sin
embargo, me resultó extremadamente gratificante poder componer y encontrar en
la marcha los elementos que componen la obra. Es una forma de producción muy
diferente.
RK: El recorrido, si
uno lo hace con minucia inquisitiva, te deja la sensación de que hay la
intención de un relato, me refiero a un relato macro, que engloba el conjunto
más allá de que cada pieza tenga ese potencial de encerrar un mundo que apela
mucho a la propia imaginación del espectador; pero a la vez siento que ese
relato se manifiesta desde una anti-narrativa, por lo dislocado de los
elementos, la profusión y variedad de los mismos (vas de Godzilla y el hongo
atómico a láminas e ilustraciones educativas de todo tipo: botánicas,
históricas, tipologías arquitectónicas, etc....!posmodernismo en esteroides!).
Es como si parte de la diversión fuese plantear el reto de una ficción sin
sendero definido. ¿Cómo ves esto?
FF: Hay una
intención inicial de plantear el problema de "el monstruo imaginario"
estas construcciones sociales que terminan siendo devoradoras de cosas y
experiencia reales, me explico: me interesó el texto de Hobbes sobre el Estado,
de ahí el título de una de las obras y de la muestra, es un tratado
fundacional de la política moderna que justifica la necesidad de seres que
ordenen y protejan a los ciudadanos de ellos mismos, y que a la par son
entelequias risibles, cuando no crueles. Tomando en cuenta esto creo que hay
que "someterse al soberano" entiéndase forma de gobierno útil y
pragmática que intento parafrasear en pulpos y medusas transparentes. Este
podría ser el relato tentativo. Pero al final, como observas, las narraciones
son erráticas y las asociaciones que planteo trascienden la primera intención.
Estas criaturas imaginarias que causan estragos "de deveras" están
presentes como silogismo de la necesidad humana de abandonarse a la fuerza de
otros, creo que es inevitable y consecuente que sucedan estas dinámicas. Con
estas ideas rondando, traté de hilvanar esta serie de trabajos, cediendo en
muchas ocasiones a elementos poco relacionados con el tema pero que aportan con
la sensación de ironía que a veces se percibe.
RK: Otra cosa que uno
nota de entrada es un sentido de goce en la factura misma de las obras, aquella
jouissance que en el arte del Ecuador siempre nos fue esquiva, con
excepciones claras como Roberto Noboa por ejemplo, cuyo sentido experimental en
cuanto a materiales y aplicación de los mismos siento ahora como un precedente
de suma importancia en varios artistas más jóvenes. Esto lo he conceptuado al
punto de poder establecer ya un retorno de lo "painterly" en el arte
local, que celebra el mismo medio de la pintura, pero ya no en clave
expresionista sino en sintonía lúdica. Ya no me acuerdo quién lo puso así pero hablaba
de la pintura como un "arma de seducción masiva" ¿Qué opinas?...a
nivel de collage lo que has hecho es casi un tour de force....
FF: Estoy de
acuerdo, la obra de Roberto contiene este componente de placer inherente que
contagia al espectador y como referente del arte local es imprescindible no
pensar en él cuando asumes la intención de replantear formalmente tu
propuesta. En este sentido la opción de usar nuevos vocabularios dentro de
mi producción me resultó muy atractiva, en especial creo que el collage y
los ensamblajes son ejercicios muy interesantes que pueden permear al
espectador estas pulsiones que se registran cuando elaboras algunas obras.
Desde el inicio se evidencia que no hay trampa en la presentación de los
trabajos, no me reservo nada sobre la fabricación de los mismos, creo que
antepongo la empatía que pueden producir los pequeños detalles y la atención
que demanda cada pieza por separado para que el espectador descubra contenidos
por él mismo.
RK: Pongámonos
psicoanalíticos: medusas, calamares, tentáculos....son imaginarios muy
sugestivos por supuesto, en algunos de nuestros siempre truncos y apurados
intercambios me parece que me comentaste que tenías un interés por repensar los
fundamentos mismos de la sociedad, de la necesidad que tenemos por estructuras
de gobierno, algo en esa línea (no se si ciertos elementos arquitectónicos que
aparecen representados apuntan también a aquello)...obviamente este tipo de
reflexiones dentro de un clima dónde justamente aparecen cuestionamientos tan
potentes al devenir de los sistemas políticos en el mundo significa una postura
un tanto ambigua, elabora sobre esto y cómo estaría reflejado aquello en tu
trabajo...
FF: El punto
de partida fue El Leviatán y todas las acepciones posibles sobre el término,
desde monstruos marinos, novelas policiales y personajes de video juegos. Hay
planos arquitectónicos, capiteles, máquinas y reproducciones de batallas,
tienen que ver con la idea de nación y guerra. Pero son presentadas de forma
atractiva que creo que se cumple eso de que "lo terrible tiene algo
profundamente hermoso", como una casa ardiendo.
Tengo escepticismo sobre los sistemas
políticos actuales, en resumen estamos lejos de un anarquismo comunitario u
otras foras de cooperativismo o autogobierno que me parecerían mas saludables o
si quieres ecológicas. Pero para la mayoría de escenarios sociales, el sistema
que delega las decisiones de millones a unos cuantos, requiere de un salto
de fe muy grande para aspirar que funcione. La complejidad de estas formas de
autoridad se exponen en imágenes bellas y terribles a la vez. Si pongo como
ejemplo a nuestro contexto tengo la sensación que en política nacional se
exagera un poco, es decir, estamos ante una forma de administración muy
distinta en cuanto a prioridades, a la que tuvimos en 30 años, creo que es un
Gobierno con sesgos autoritarios muy fuertes, que confronta a sus enemigos
ideológicos con todo lo que está a su alcance, pero ¿qué régimen no
aprovecharía ese tipo de ventajas? No obstante, está bastante lejos de ser una
dictadura. Solo me preocuparía de verdad si la mayoría de la población empezara
a temer y a tomarse en serio lo que se dice del régimen en cuanto a sus
monstruosas pretensiones de poder desmedido.
Guayaquil,
8-13 de octubre de 2012
No hay comentarios.:
Publicar un comentario