domingo, julio 04, 2010

Javier Lazo - Vicente Gaibor: Dos de la Nueva Crónica Guayaquileña

Lazo y Gaibor, junto con Ricardo Bohorquez, son probablemente los practicantes más visibles y constantes de lo que quisiera llamar la Nueva Crónica Guayaquileña. Han hecho de la fotografía un efectivo instrumento de registro del paisaje social y urbano de la ciudad, con claros acentos en la cotidianidad de sus dinámicas, y la incorporación de una mirada de corte antropológico que desborda el afán meramente esteticista de la imagen postal.


A pesar de la percibida inicial reticencia a operar en el circuito legitimante -y habiendo creado ya un cuerpo de obra significante que los sitúa en diálogo con -más no decididamente dentro de- el arte contemporáneo local, estos fotógrafos han comenzado a exponer activamente en museos y espacios independientes. Es hora de reconocer que el tipo de producción que generan, sumada a la de las figuras precursoras de aquella raigambre que operan desde hace una generación atrás (ejemplificadas por los hermanos César y Bolo Franco), los prefigura como un movimiento con forma e identidad propias, aportando carácter y diversidad al escenario cultural de Guayaquil.


Rodolfo Kronfle Chambers (julio, 2010)


VICENTE GAIBOR
VACÍOS
Centro Cultural Simón Bolívar - MAAC - Guayaquil (junio 2010)

Vacíos se sustenta en fotografías, que he realizado a lo largo de los últimos 3 años. Es un ensayo sobre los intercambios y sensaciones personales que se desarrollan en los interiores arquitectónicos y de como estos, a su vez condicionan nuestro proceder, dependiendo de la intensidad y variedad de usos, los imaginarios que representan y las lecturas o interpretaciones "a posteriori" que cada uno obtiene de dicha experiencia.

El montaje de la muestra será sobre las paredes de la sala multifuncional del MAAC, se proyectarán simultáneamente 4 secuencias de 20 fotos a 5 seg cada una, es decir un minuto y medio por pantalla. (VG)









JAVIER LAZO
SECCIONADOS
Museo Presley Norton (julio 2010)

Un análisis particular de confrontación en el entorno urbano, a través de 13 fotografías que delínean elementos, sombras y cuerpos seccionados, materializando con estos elementos el control impuesto al ciudadano, poniendo de relieve el fenomeno de deshumanización del mismo, captado en una de las principales intersecciones simbólicas y de tráfico de Guayaquil. (JL)





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